1.- Tener estructuras simples y organizaciones con mínimos niveles jerárquicos, con desarrollo humano y formación interna de las funciones ejecutivas. Tener flexibilidad y rapidez en las decisiones. Operar con las ventajas de la empresa pequeña, que son las que hacen grandes a las grandes empresas.
2.- Mantener la austeridad en tiempos de vacas gordas. Esto fortalece, capitaliza y acelera el desarrollo de la empresa. Asimismo, evita los amargos ajustes dramáticos en las épocas de crisis.
3.- Estar siempre activos en la modernización, crecimiento, capacitación, calidad, simplificación y mejora incansable de los procesos productivos. Incrementar la productividad, competitividad, reducir gastos y costos guiados siempre por las más altas referencias mundiales.
4.- La empresa nunca debe limitarse a la medida del propietario o del administrador. No sentirnos grandes en nuestros pequeños corralitos. Mínima inversión en activos no productivos (por ejemplo, Grupo Carso siempre tuvo sus oficinas en las plantas de las empresas industriales; ahora que da un giro comercial, tendrá oficinas públicas).
5.- No hay reto que no podamos alcanzar trabajando unidos con claridad en los objetivos y con conocimiento de los instrumentos para lograrlos.
6.- El dinero que sale de la empresa se evapora. Por eso reinvertimos las utilidades.
7.- La creatividad empresarial no sólo es aplicable a los negocios. También es la solución de muchos de los problemas de nuestros países. Lo que hacemos a través de las fundaciones del grupo.
8.- El optimismo firme y paciente siempre rinde sus frutos. Esto es de mi padre.
9.- Todos los tiempos son buenos para quienes saben trabajar y tienen con qué hacerlo.
10.- Nuestra premisa es y siempre ha sido tener muy presente que nos vamos sin nada; que sólo podemos hacer las cosas en vida y que el empresario es un creador de riqueza que la administra temporalmente.
Publicado en CNNExpansión.
3 comments:
Fáaacil... ¿a poco no?... ¿para que un MBA o un MIB o algo de eso?... }=)
Esta semana aparecía en España en la revista Tiempo un artículo sobre este magnate mexicano, y la verdad es que tiene a Telefónica y a otras multinacionales muy preocupadas por lo que califican de políticas económicas monopolísticas. También se analizan sus influencias muy amplias en círculos del poder político y de otros es los que debería de ser ajeno lo económico, y como no, se nos recuerda que está asesorado por dos expresidentes de Gobierno de la talla de Bill Clinton y de Felipe González.
Un saludo desde España.
Hola Roberto. Sobre influencias políticas, Telefónica tampoco canta mal las rancheras, dado que en México acaban de contratar al ex-secretario de Hacienda del gobierno de Fox Francisco Gil Díaz para liderear sus operaciones.
Vaya, no creo que esté bien y sobre Telmex y América Móvil hay mucha tela de dónde cortar, pero me parece un poco raro que se quejen sobre algo que ellos también hacen.
Post a Comment